Pascual Educación y Adiestramiento Canino en Alicante

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domingo, 6 de octubre de 2013

COMUNICACIÓN CANINA PARTE I (Tera-Can Pascual Adiestramiento y Educación Canina en Alicante)

La piedra filosofal de 
Tera-Can es la 
Comunicación



Si tienes un problema de ansiedad por separación… tienes probablemente un problema generado por una falta de entendimiento en la comunicación. Si tienes un problema de miedos… muy posiblemente estés comunicándote de una manera errónea con tu perro. Un problema de agresividad… casi seguro que la comunicación no está del todo bien. 

PARTE I

 Visión humana:

 La problemática del lenguaje verbal humano es que resulta extremadamente perfecto para comunicarnos entre nosotros. ¿Quién no ha sentido fuertes emociones leyendo un libro?, ¿Quién no se ha reído leyendo un chiste? Sabemos interpretar de forma casi perfecta la emotividad que traen consigo las palabras, esa información nos alcanza de tal manera que despierta nuestra empatía que, ayudada con nuestra creatividad, imaginación, y capacidad de percepción abstracta. Nos lleva a meternos de lleno en la piel del narrador.

 Usamos tan bien esta cualidad que hemos olvidado el echo de que casi un 90% de la información que emitimos hacia el receptor, es en forma no verbal. Un 75% de esta información es forma inconsciente.

 Los perros, aunque interpretan algunas palabras de la lengua castellana, no comprenden frases. Sé que esto resulta obvio para todo el mundo. Aún así, la realidad es que llevados por la frustración de no saber cómo comunicarnos de forma correcta, TODOS usamos frases castellanas para intentar comunicarnos con ellos en alguna situación determinada. De esta forma caemos en los frecuentes errores de comunicación entre estas dos especies.

 -¡Estate quieto ya, me estás cansando!
 -¡Te he dicho que vengas!
 -¿Qué te pasa bonito, tienes miedo?
 -Quieres bajarte ya ¡deja de saltar pesado!

 Si analizamos las frases anteriores, escritas en un perfectísimo castellano… Y a su vez, intentamos visualizar mentalmente cada uno de esos escenarios, con cada una de las expresiones que proyectamos… Seguramente la información que recibe el perro, no es la que emite el humano. Falta de Comunicación.

 En la primera frase por ejemplo. Verbalmente comunicamos nuestra intención de que el perro cese su actitud nerviosa. En cambio, nuestro lenguaje no verbal (90%), dice todo lo contrario. Estamos nerviosos, seguramente hasta apartamos a empujones al perro o intentamos esquivarle con, lo que parece visto desde fuera, bailes de salón perro/humano. Le estamos diciendo al perro claramente que se ponga nervioso.

 Tenemos que tener claro que NUNCA le puedo pedir a un perro que adopte un esta anímico que nosotros no tenemos. Conseguir que el perro se calme con agresividad… no traerá nada bueno en el futuro, generará un estado de represión. Conseguir que se calme cuando yo estoy nervioso… solo traerá frustración a nuestro amigo por no entender bien nuestro mensaje.

 Esto en humanos ocurre de forma similar. Cuando una persona consigue callar a otra con un grito, seguramente esta segunda sienta intimidación y se reprima. El ejemplo de la vieja escuela de “haz lo que yo te diga, no lo que yo haga”, no trae más que complicaciones conductuales tanto a humanos como a perros.

 Un ejemplo de otro extremo sería el miedo. La reacción inmediata de una persona que ve a un perrito temeroso es la de intentar calmarle con voz y palabras dulces. Al perro le llega un mensaje bien distinto. Si escuchamos el sonido de nuestra voz sin interpretar las palabras en lengua castellana, oiremos algo similar a un gemido canino. En el lado del lenguaje no verbal estaremos proyectando debilidad generada por la compasión que ha despertado nuestra capacidad empática. Ahora, y gracias a nuestro complejo cerebro, sentimos parte del dolor que él siente. Esto, si no lo controlamos, es un error garrafal. Generaremos una situación contraria a la que realmente queremos. Dónde antes había un perro con miedo, ahora habrá un humano también. Si el perro nos dice... tengo miedo de ese camión gigante, nosotros le decimos... Yo también tengo miedo, el camión asusta mucho.

 Debemos intentar, en la medida de lo posible, ser coherentes con las emociones que proyectamos. Intentar controlar nuestro lenguaje no verbal es fundamental para iniciar una buena conversación entre especies.

 Controlando la comunicación verbal y no verbal, no habrá perro que no nos entienda. Ahora sólo falta que nos quiera hacer caso… pero eso… es otro tema. ;) 



TODO ESTO Y MUCHO MÁS EN:



Pascual Verdú (Adiestrador inscrito en el Registro Oficial de Adiestradores Caninos Capacitados de la Comunidad Valenciana CV-ACC70)

 Tera-Can (Pascual Educación Canina en Alicante). Conoce más sobre el maravilloso mundo canino. Resuelve problemas de conducta y malos hábitos de tu perro simplemente usando sana y natural comunicación canina. Educación Canina y Adiestramiento Canino Alicante.

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